miércoles, 21 de abril de 2010

A todo el mundo le gusta El señor de los anillos

A todo el mundo le gusta El señor de los anillos. O al menos, no le disgusta. Tampoco la música Celta, ni las películas históricas de Antena 3, que por otra parte alguien debe haber considerado auténticos mitos del cine porque se repetirán años y años a pesar de haberse estrenado nuevas y mejores. No me crucifiqueis por utilizar la expresión "a todo el mundo"; no es frecuente pero en este caso me permitiré generalizar. Me llama mucho la atención esa atracción fatal que ejerce la Edad Media sobre la gente de mi entorno, sea de la generación que sea. Quizá todo lo que no suponga controversia de opiniones merece mención en este mundo tan quejica y belicoso...

Pero volviendo al tema que planteo, me pregunto porque esta época histórica protagoniza tantos relatos, tantas canciones y tantas escenificaciones seis siglos después. Y creo que la respuesta está en que se trata de una percepción del mundo totalmente opuesta a la actual. El misticismo impera sobre la asfixiante razón y democratiza el conocimiento de la verdad absoluta. La incuestionable divinidad permite ejercer un control social desmedido. Las creencias se fundan en mitos dispares, pero siempre encuentran una explicación razonable si esta se presenta en boca de muchos. En conclusión, una vida dominada por la exaltación de las emociones. ¿Quién se negaría a abandonar durante unas horas esta empírica e insulsa franja temporal, y a participar de la vehemencia del jinete que pone su vida en manos de un ideal, o del tedio del humilde campesino que espía a su cortesana sin sentirse digno de cruzar palabra con ella? (¿Es posible que esto último se base en hechos reales, o no será más que otra treta poética para enternecer al gen X?)

Sin adoptar un tono demasiado carroza; quien lucha hoy por un ideal lo hace empuñando un fardo de billetes cual maza despiadada, y quien es pillado in fragantti mirando de reojo a una mujer, pasa la noche entre barrotes por depravado sexual. Con este panorama, ¿cómo no va a ponerse una nostálgica?

8 comentarios:

  1. Interesante reflexión. Existe belleza en la poesía de la épica. Y el cine o la literatura han encontrado un filón en aquella época, en comportamientos y actitudes en torno a códigos que convertían al hombre en leyenda...

    Sin embargo, los libros de historia nos enseñan que también entonces el ser humano ejerció la infamia, la hipocresía y la demagogia a partes iguales. Calcado a nuestros días. Difería el envoltorio. Y sabemos lo que eso vende...

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  2. Sí pues los tiempos han cambiado y mucho, se añora lo pasado pero no para que se reestablezca sino como un pasatiempo del recuerdo. Un abrazo

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  3. Yo diría que mas que la edad media se "añoran" las gestas de los libros de caballería. De lo que las producciones de cine y literatura se olvidan, o prefieren obviar (salvo contadas excepciones), son cosas como que entonces no éra raro que un campesino muriera de hambre acosado por los impuestos de su señor/Rey y de la iglesia, amén de la voluble justicia que se aplicaba entonces.

    Eso sí, es muy bonito imaginarse como un valiente caballero andante al rescate de una atormentada princesa.

    Saludos!

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  4. Yo te diré que, para llevar la contraria, a mí me aburren profundamente esas historias. Vi en el cine la primera de El Señor de los anillos y creí que me echaban del cine de tanto bostezar, y considero que Braveheart es el mayor bodrio de la historia del cine. Prefiero tragarme una de Steven Seagal, y eso para mí es mucho decir.

    Por cierto, ¿he mencionado ya que me declaro fan incondicional de tu manera de escribir?

    Un beso

    Patricia

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  5. Realmente es una época llena de contrastes que la alejan profundamente de nuestro modo de vida actual.. como tu dices se enfrenta la exaltación de las emociones con el materialismo y la superficialidad actuales y el oscurantismo y la obediencia con la supuesta libertad de la que gozamos ahora... supongo que es una manera de evadirnos.
    A mi personalmente tampoco me gustan mucho este tipo de películas aunque un toque heróico y romántico de vez en cuando tamopoco viene mal.

    Un beso!

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  6. Buenas!

    Hacía tiempo que ojeaba tu blog, pero no comentaba, y creo que ya es hora, porque un blog (y lo se bien porque tengo 4) se alimenta de estos comentarios.
    Al principio pensé en comentar a lo "hoygan" para recibir el diccionario que comentas en el formulario de postear comentarios, pero dije para mi...nah, comenta bien leñe jaja.

    La verdad es que esta época a mi también me gusta mucho, es completamente diferente a la actual, y es cierto eso de que ahora el que lucha lo hace con un fajo de billetes, y no es lo bueno. Tampoco digo que a espada sea lo correcto, porque no lo es...pero a lo mejor deberíamos considerar cambiar algunos aspectos de estos...hacia la palabra.

    Un saludo

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  7. Hace unos días escribí esto:

    "(...)una época donde había cuatro cosas a tener en cuenta: comer, beber, sobrevivir y proteger a los tuyos. No hacía falta más. Y el acero era el iPad de la época, el hacha la PSP y la cota de malla, el movil. Matar y morir por lo que creías estaba bien visto y no había relativismo de ningún tipo; tenemos a los buenos y a los malos. La magia era pan de cada día y los monstruos campaban a sus anchas.

    Definitivamente, una época sencilla congelada y preservada en la literatura, el cine, la música y los videojuegos."

    La magia y los monstruos existían por la incultura de las gentes del lugar. Todo lo desconocido se consideraba como tal.

    Esta época atrae porque es muy espectacular y porque es completamente diferente a lo que es ahora. Cosas como la magia y el acero son el pan de cada día. Los castillos, los dragones,etc

    Además en el cine, con las nuevas técnicas se hace bastante bien y resulta más o menos sencillo hacer una peli medieval que tenga éxito. Por ejemplo, han convertido Robin Hood en El Señor de los Anillos con una batalla super-épica.

    Pero como dicen por ahí, a veces (que no siempre), se olvida que el noble caballero aplasta al campesino, que la Iglesia le obligaba a dar la décima parte de la cosecha y que tenían que pagar casi hasta por mear... (molino, puente, etc) Pero eso tendría menos éxito.

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  8. Quizás ocurra también que miramos hacia atrás y vemos una época en la que el honor no sólo existía, sino que lo era todo para muchos. Una época en la que eso era lo último que perdías (y no el trabajo o la tele de plasma)

    Supongo que nos quedamos de tiempos pasados con lo mejor (como nos ponen de brutos la "democracia" griega y las orgías romanas) y nos olvidamos de lo peor... Pena que aparte de recordar las cosas buenas o que nos gustan no las pongamos en práctica.

    Un saludete.

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Se ruega canalizar la aversión hacia mi persona sin recurrir a la extremista economía lingüística del msn, al estilo montaña rusa quinceañero o a la jerga "hoygan" (en este último caso será inmediatamente investigada la IP del visitante para obsequiarle con un diccionario de bolsillo)

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